Mi Bella y Bestia fueron los últimos muñecos de mi niñez, luego me hice mayor y por unos años (pocos) los olvidé. Digo pocos, porque ya a los quince las recuperé y empecé a hacerles vestidos por gusto, aunque evidentemente ya no jugaba, me encantaba diseñar y coser.
Recuerdo que fueron regalo de mi cumpleaños, que los pedí hasta el cansancio. Llegué del cole, y me decepcioné por que al llegar no había regalos para mí, fui a soltar la mochila a mi cuarto y cuando llegué a la cocina para comer, estaban sobre la mesa.
Jamás olvidaré la impresión y la sorpresa que me llevé, es uno de los mejores recuerdos que conservo. Me conmovió el hecho de que mi padre tuviera que ir hasta Toys'rus para comprarlos, que hicieran todo ese esfuerzo. En una casa en la que ambos padres trabajan con turnos dispares, y con tres hijas pequeñas, para mí era una proeza que se hubieran molestado en buscar mis muñecos, hasta encontrarlos en las afueras de la ciudad.
En fin, que como podéis imaginar he jugado con ellos hasta el cansancio, y mi Bella estaba realmente deteriorada, en su momento le pegué la cabeza con pegamento, de mala manera. El cuerpo estaba cubierto de esmalte, quise pintarle una camiseta y acabó muy mal.
Pero ahora, como poco a poco voy aprendiendo nuevas cositas para restaurar muñecas, me he animado con ella. Le he cambiado el pelo (le he hecho un "reroot"), y también el cuerpo. De un cuerpo "TNT" ha pasado a un "Bellybutton", y le he repintado los labios. Lo mejor es que al transplantarle un cuerpo, ahora parece nueva, la cabeza se mueve con total normalidad, ha quedado perfecta.
![Bella y bestia. Barbie Mattel. Bella y bestia. Barbie Mattel.]()
Me decidí por hacerle un deslumbrante vestido dorado, mi pequeño homenaje a su traje original. Pensé incluso en utilizar algunas piezas de su vestido, pero no soy capaz de descoserlo.
![Bella y bestia. Barbie Mattel. Bella y bestia. Barbie Mattel.]()
Conservo sus trajes originales, pero el dorado ha pagado el precio del tiempo, y se le ha caído todo el dorado. Lo único que no tengo es la cabeza de la bestia, así que he pasado de ponerle el disfraz.
Recuerdo que fueron regalo de mi cumpleaños, que los pedí hasta el cansancio. Llegué del cole, y me decepcioné por que al llegar no había regalos para mí, fui a soltar la mochila a mi cuarto y cuando llegué a la cocina para comer, estaban sobre la mesa.
Jamás olvidaré la impresión y la sorpresa que me llevé, es uno de los mejores recuerdos que conservo. Me conmovió el hecho de que mi padre tuviera que ir hasta Toys'rus para comprarlos, que hicieran todo ese esfuerzo. En una casa en la que ambos padres trabajan con turnos dispares, y con tres hijas pequeñas, para mí era una proeza que se hubieran molestado en buscar mis muñecos, hasta encontrarlos en las afueras de la ciudad.
En fin, que como podéis imaginar he jugado con ellos hasta el cansancio, y mi Bella estaba realmente deteriorada, en su momento le pegué la cabeza con pegamento, de mala manera. El cuerpo estaba cubierto de esmalte, quise pintarle una camiseta y acabó muy mal.
Pero ahora, como poco a poco voy aprendiendo nuevas cositas para restaurar muñecas, me he animado con ella. Le he cambiado el pelo (le he hecho un "reroot"), y también el cuerpo. De un cuerpo "TNT" ha pasado a un "Bellybutton", y le he repintado los labios. Lo mejor es que al transplantarle un cuerpo, ahora parece nueva, la cabeza se mueve con total normalidad, ha quedado perfecta.
Me decidí por hacerle un deslumbrante vestido dorado, mi pequeño homenaje a su traje original. Pensé incluso en utilizar algunas piezas de su vestido, pero no soy capaz de descoserlo.
Conservo sus trajes originales, pero el dorado ha pagado el precio del tiempo, y se le ha caído todo el dorado. Lo único que no tengo es la cabeza de la bestia, así que he pasado de ponerle el disfraz.